Autora: Ana González Barranco
El pasado 3 de Noviembre a las 20:00h tuvo lugar la primera Masterclass Nacional del Club de estudiantes La Cocina. A modo de recordatorio, en esta Partida o proyecto se busca conocer las diferentes gastronomías del mundo desde la perspectiva de los alumnos. Se pone en valor la multiculturalidad del club aportando una visión única de sus nacionalidades gracias a las anécdotas e historias sobre la cultura que les ha visto crecer.
En esta primera sesión sobre Venezuela, dos alumnos nativos, Rogelio Valledares y Marvin Ardila (4º grado en gastronomía y ciencias culinarias) dieron a conocer su país y el contexto general que lo envuelve. Con cocina fuertemente marcada por influencias extranjeras, este territorio también cuenta con su propia riqueza interna de materias primas tan demandadas a nivel internacional como es el cacao.
La ponencia dio comienzo con una presentación sobre la localización y geografía, viajando a través de la pantalla y por un instante, hasta la Cordillera de los Andes venezolanos con una visión aérea de los Llanos y sus kilométricos ríos. A continuación, un repaso por la historia situó en el eje temporal colonizaciones y actas de independencia; hasta que finalmente se dio a conocer la delicada situación política, social y económica actual.
De este modo, no sólo se habló de platos tradicionales e ingredientes autóctonos, sino que se pudo conocer desde la perspectiva de los ponentes, temas como la dolarización o la migración, así como tendencias y dificultades a las que el país sudamericano hace frente en la actualidad.
Tras poner en contexto al público, llegó el momento que todos estaban esperando: la gastronomía venezolana.
En materia de exportación gastronómica, brillaron el Ron Santa Teresa o Ron Cacique, bebidas que se pueden encontrar en los lineales de supermercados de todo el mundo. No faltó tampoco el cacao venezolano, concretamente de la comunidad cacaocultora de Chuao y que el propio Jordi Roca calificó como el mejor del mundo. Ambos productos diferenciados y conocidos, ambos con DOC (Denominación de Origen Controlado).
En materia de platos y elaboraciones, las arepas o tortas de harina de maíz tuvieron su protagonismo sorprendiendo con la variedad de rellenos que ofrecen; se descubrió el crujiente casabe de yuca, un tipo de pan ácimo ideado por los indígenas precolombinos; se habló del ají dulce y condimentos como el onoto o achiote, así como de la textura y sabor de sus quesos frescos; y se explicaron recetas como a la hallaca, plato tradicional venezolano que se consume principalmente en navidad.
Como no podía ser de otro modo, los asistentes probaron un bocado de estas elaboraciones pudiendo sacar sus propias conclusiones.
Finalmente, dos preguntas desde el club cerraron la ponencia: “¿Qué diferencia al venezolano de otra persona? y ¿Qué papel tiene la gastronomía venezolana en vuestros planes de futuro?”. Las respuestas fueron directas: “El carisma venezolano es único y permite que cuando hay un venezolano en la sala se detecte con facilidad”. Pues es su trato con las personas, su soltura y la capacidad de tratar como familia a aquel que acaba de conocer, las actitudes que le delatan. Respecto a los planes futuros, Rogelio y Marvin sí tenían un propósito claro: “potenciar y poner en valor la materia prima venezolana”, aportar y contribuir a la mejora de su país tomando la gastronomía como herramienta de acción.
Un país, una cultura, chefs y una gastronomía, así es Venezuela, país protagonista de la primera Masterclass Nacional de La Cocina. ¡Te esperamos en la próxima pequeña locura!